Este lunes, luego de que Mauricio Macri emitiera un mensaje grabado, habló el ministerio de Haciendas, Nicolás Dujovne, en una conferencia de prensa, donde afirmó: “la recesión va a ser más pronunciada que la que preveíamos”. En ese sentido, el funcionario nacional aseguró que el Gobierno apuntará al “al déficit cero“, aunque otro dato fue el que más llamó la atención. Es que se filtró que para este año, el Ejecutivo espera que haya una inflación del 42% y una caída de la economía del 2,4%.
Ante los periodistas, Dujovne explicó:”De la reducción, 1,3% del PBI lo estamos logrando con el aumento de ingresos, mientras que el 1,4% se genera con una baja del gasto público. Es un esfuerzo balanceado entre ingresos y gastos, continuamos con la política de reducción de gasto” y presentó un informe donde brindaba algunos pasos para alcanzar el objetivo impuesto por Cambiemos.
Sin embargo, en uno de los documentos que hoy publicó el Ministerio de Hacienda y Finanzas en su sitio web, bajo el título de “Acciones para alcanzar el equilibrio fiscal”, bajo el apartado “Balance fiscal 2018 – 2019”, aparecía una nota al pie que aseguraba que para este año, la administración macrista espera una inflación del 42% y una caída de la economía en 2,4%.
Estos datos se volvieron virales en las redes sociales, por lo cual, definieron modificar el documento y borrar estos números. De todas maneras, permaneció la proyección del Gobierno de que eliminará el déficit fiscal primario en 2019 para obtener equilibrio en las cuentas públicas y a partir de allí ya no volver a perder el superávit.
Incluso, la presentación del ministro de Hacienda destacó que las cuentas públicas volverán a registrar un superávit del 1% en 2020, para lo cual buscarán realizar una baja del gasto público a partir de una batería de medidas de ajuste, principalmente en la obra pública, y los ingresos que se lograrán a través de las retenciones sobre la exportaciones de granos, oleaginosas y sus derivados.
Las retenciones se extenderán a los principales rubros exportadores, con el fin de obtener una recaudación extra equivalente al 1% del PBI. Esta medida vendría a ser la de mayor impacto fiscal y se aplicaría sobre las exportaciones de los sectores de economías regionales, mineras e industrias. La cual sería una apropiación de la renta excepcional.
De todas maneras, el funcionario nacional no aclaró si se tratará de un impuesto transitorio o de larga duración, siendo que esta medida recuerda a una tomada durante el gobierno de Eduardo Duhalde, en el 2002, después de la crisis del año anterior, y cuya extensión en el tiempo provocó que, al perderse la ventaja competitiva, se complique el sector.
Además, Dujovne comunicó un ahorro del 0,7% del gasto de capital, es decir, el gasto en activos fijos. Producto de la devaluación, el recorte será de un 50% del PBI. Entre otras cuestiones, afectará a las obras de infraestructura. Al tiempo que habrá un ahorro en subsidios, producto del traspaso de la Tarifa Social Eléctrica y Transporte Automotor.